domingo, 30 de mayo de 2010

El día de las mujeres aladas.

Llegará el día, -dijo Lilith- en que las toallas sanitarias vuelen. Las mujeres aladas ascenderán a los cielos, donde ángeles y arcángeles temblarán excitados al sentir por fin tan cerca labios, lenguas, senos, sexos, y abandonarán su santidad resguardada desde el amanecer de los siglos para saciarse de los placeres de la carne. Entonces los hombres en la tierra alzarán sus cabezas hacia el cielo, contemplando boquiabiertos el diluvio de ángeles caídos.

El día de las mujeres aladas -dijo a Yahvé- tu cielo quedara desierto de santos y arcángeles sirvientes. El hijo sentado a tu diestra abandonara su trono y cambiara tu casa por un par de magdalenas piernas, aquellas que tanto le negaste en su primera venida. Y al encontrarte tan solo y tan cansado, darás el juego por perdido, poniendo punto final al universo, sin ganas de volver a comenzar.

Cuídate de la mujer, te digo. Tu omnipotencia ya agoniza succionada por mis labios vaginales.


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4 comentarios:

  1. Me gusta la imagen del final, aunque quizá un poco brusca... ¿ya lesite La rebelión de los ángeles de Anatole France?

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  2. No la he leído, la buscaré ahora mismo. Gracias por la sugerencia.

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  3. Me gusto mucho.
    Aunque... porque cuidarse de las mujeres?

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  4. Por razones anatómicas es poco probable que los hombres (sin importar preferencias sexuales) lleguemos a usar toallas femeninas, por lo tanto nunca tendremos alas y nos resignaremos a verlas acender maravillados.
    Además el judeo-cristianismo al ser una religión patriarcal, se las ha arreglado para minimizar a la mujer en la mayoría de sus textos sagrados, eso denota un miedo a la mujer muy hijo de pene. Intentando descubrir el por que salió este cuento.

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